e-ISSN: 1131-5598
RESEÑAS
Una de las formas más intuitivas para comprender cualquier ciudad consiste en rastrear las huellas de las culturas que a lo largo del tiempo han dado lugar a su actual configuración. Así, este libro se adentra en la historia urbana de Málaga y su paisaje, entendida como una especie de palimpsesto en el que cada época ha aportado piezas que conforman su conjunto, como si se tratase de estratos sedimentarios. A este primer tomo, centrado en los primeros asentamientos urbanos, le seguirán otros que tratarán sobre sucesivos periodos históricos.
Aunque el urbanismo de nuestro tiempo aborda complejos problemas técnicos de la ciudad y su paisaje, existen importantes cuestiones que hoy demandan una mayor sensibilidad, según plantea este libro, atendiendo al propio pasado, a los pormenores de la topografía, litorales y ríos, perfiles o siluetas visuales, huertas y arboledas, e incluso montañas lejanas. Decía el historiador de la arquitectura Fernando Chueca Goitia que lo que distingue una aldea de una ciudad no es la extensión o tamaño, sino la presencia de alma ciudadana. El verdadero milagro se produce cuando nace el alma de una ciudad, que le da rostro peculiar o identidad propia; cuando la casa, el palacio o el templo dan lugar a una gramática de formas que constituye su imagen urbana.
El libro ha sido ilustrado de forma exquisita por un experto en imagen urbana, Luis Ruiz Padrón, doctor arquitecto y profesor de la Universidad de Málaga, que leyó en 2016 su tesis doctoral Málaga, dibujos de ciudad y paisaje hasta 1850. Este reconocido dibujante ha publicado importantes libros sobre el paisaje y la arquitectura de Málaga, Granada, Toledo y otras ciudades. Además, la publicación cuenta con cuidados textos -en español e inglés- de los arqueólogos Alberto Cumpián, José Suárez y del propio Luis Ruiz. Esta obra institucional, cuya documentación ha sido recopilada y custodiada por la Sección de Arqueología de la Gerencia Municipal de Urbanismo de Málaga, ha sido coordinada y dirigida por la arquitecta Aurora Zafra, que firma la introducción; también son miembros del equipo redactor de contenidos los arquitectos Cristina Gallardo y Oscar Ortega; más Francisco de la Torre, alcalde y autor del prólogo.
Lejos de plantearse un rígido trabajo historiográfico, se ofrece una cuidadosa selección de episodios arqueológicos, arquitectónicos y paisajísticos que sitúan al mar y al enclave territorial de la ciudad como una de sus principales señas de identidad, usando el dibujo como privilegiado medio de análisis y síntesis.
De este modo, el libro trata de explicar de forma amena la razón de ser o el alma de Málaga ilustrando la vida y el entorno de sus primeros habitantes, cuyos ideales y símbolos labraron su imagen; un valioso legado que no es fácil de comprender en su plenitud.